lunes, 17 de agosto de 2015

Estrategia de Océano Azul

Estrategia de Océano Azul

                Si bien es cierto que en muchos mercados la competencia es viciosa y despiadada, buscando manchar de rojo el océano con la sangre de sus oponentes, el océano azul es entonces aquel mercado que no conoce la competencia.  Esta lucrativa oportunidad en un mercado sin explorar da acabo a los grandiosos y únicos productos nunca antes vistos, los productos innovadores que revolucionan la tecnología, las tendencias, los comportamientos de compra y los estándares de calidad.
                La estrategia de Océano Azul es entonces el esfuerzo de una compañía en identificar y plantarse en un mercado que no está manchado por el oponente, y donde la estrategias basadas en la competencia son absolutamente irrelevantes. La estrategia de Océano Azul permite eliminar pensamientos tradicionales como la inefectiva estrategia de incrementar costos con el fin de agregarle valor para el comprador (como bien fue el caso con los Circos tradicionales, que aumentaban el número de payasos y domadores de animales con el objetivo de maximizar asistencia e ingresos), por lo cual muchas empresas en océanos rojos se ven luchando por obtener aunque sea un margen bajo. La prosperidad de plazo extenso (10 a 15 años) bien descansa en una estrategia de Océano Azul, donde la saturación y la falta de diferenciación no son un problema, y donde la demanda nace en un interés legítimo por el producto, y no simplemente por el precio. Esto no significa que las empresas que tienen productos en océanos rojos no pueden aventurarse a crear su propio océano azul, ya que si bien es ciertos muchos de los océanos azules en la actualidad son extensas renovaciones de sectores existentes, pero con giros que hacen que la competencia sea de ninguna importancia.
¿Para qué gastar los recursos de mi empresa en una estrategia que se basa en mantenerse a flote en un mercado saturado, cuando podría ser el líder y único competidor en un mercado nunca antes visto por nadie?

El Océano Azul y las propuestas de Porter
                Michael Porter propone la idea de que en una empresa hay dos maneras de obtener una ventaja competitiva: liderazgo por costos y diferenciación. Con un agregado a estos dos elementos, Porter también especifica que la sostenibilidad en un mercado competitivo también puede nacer de una estrategia de enfoque.
·         El liderazgo por costos es simplemente la estrategia competitiva que consistente en tener los costos más bajos en comparación a los competidores. Los casos más reconocidos serían las actuales empresas como McDonald’s o IKEA, que han llegado a un punto sumamente beneficioso en la economía de escala.
·         La estrategia de diferenciación es el cambio que separa un producto o servicio del competidor. Es el giro, el agregado, el estatus de exclusividad que causa que un consumidor escoja una marca cuando bien pudo escoger otra con similar funcionalidad.
·         La estrategia de enfoque es segmentar el gran mercado y encontrar el nicho al que se le quiere servir para satisfacer las específicas necesidades de un sector de consumidores. Esta estrategia le permite a las empresas extender la mano a consumidores que nunca se vieron satisfechos por los productos mercadeados a una gran cantidad de clientes.
La estrategia de Océano Azul entonces tiene visibles relaciones con la propuesta de ventaja competitiva de Porter.
Primero que todo, el liderazgo en costos pierde su valor a la hora de considerar el océano azul, porque cualquier estrategia que se trate sobre ser líder implica que se compite con otros. En el caso del océano azul no hay con quien competir por costos, y solo se intentan reducir costos para incrementar el margen de ganancia. Los bajo costos siguen siendo un objetivo pero no con el fin de sostener la cabeza sobre el agua y mantener la posición en el mercado, si no con el fin de ser una empresa más lucrativa.
Segundo, la estrategia de diferenciación es el núcleo de la estrategia de océano azul.  Como mencione antes, muchos océanos azules conocidos hoy en día son increíbles alteraciones de segmentos existentes. Podríamos decir que los océanos azules son una versión extrema de la estrategia de diferenciación, porque el producto o servicio llega a ser tan diferente que el de la competencia, que a su vez crea un mercado completamente nuevo y sin explorar.

Por último, de una u otra manera cada empresa tiene una estrategia de enfoque. La estrategia de océano azul no deja esto al lado, ya que la creación de un producto nunca antes visto usualmente viene con la intención de satisfacer necesidades enfocadas a un consumidor. Excepto que en el océano azul, nunca antes había alguien logrado satisfacer los deseos y necesidades de esa clientela. 

Empresas que Admiro

                Preferiría no desviarme del tema de océanos azules, por lo cual me enfoco en mencionar varias empresas (aunque solo debí haber elegido una) que creo yo que capturan la esencia de la estrategia de océano azul desde la raíz. Me refiero a tres compañías fundadas y co-fundadas por el ingeniero y magnate de los negocios, Elon Musk. Es difícil no querer direccionar mis admiración y halagos hacia la genialidad de Musk a la hora de crear empresas que implicaran tanto riesgo, ya que el trabajo que ha hecho durante los años y su persistencia por lograr lo inimaginable con la raza humana ha llevado a adelantos en el área de la tecnología que nos llevara a el futuro “de las películas” con una rapidez exponencial. Para quienes estén interesados en saber más de Elon Musk, dejare un link con un corto documental acerca de su vida personal y profesional.
Las dos empresas que admiro son Tesla Motors y SpaceX. Tesla Motors es una empresa en Sillicon Valley que diseña y fabrica autos eléctricos, componentes para la propulsión de vehículos eléctricos y sistemas de almacenamiento de baterías. La visión por Musk a la hora de formar parte de Tesla Motors era probarle al mundo consumidor de que el auto eléctrico no tenía que ser pequeño y poco atractivo. Su imagen de lo que Tesla Motors podía hacer era que la empresa podía imponerse como el primero en el océano azul que diseñara autos deportivos eléctricos que revolucionaran la percepción actual sobre lo que es un auto eléctrico. Así es como nace Tesla Roadster, Tesla Model S y Tesla Model X. Así es como la empresa salió adelante desde el 2003 y se volvió un boom en la bolsa de valores en el 2013 cuando se empezaron a mostrar tremendas ganancias.

SpaceX es una ambiciosa empresa Americana al mando de Elon Musk que tiene los primeros modelos de astronaves para uso comercial. Si bien le han arrojado piedras en su dirección por leyendas del espacio como Neil Armstrong, que se oponen al viaje al espacio de manera comercial, Musk ha probado la viabilidad y la importancia de enfocar los fondos del gobierno en la exploración del espacio y el viaje a él. Con increíbles pasos al futuro, SpaceX queda en mi eterna admiración por su ambición y su importante rol en la innovación científica y empresarial. 


1 comentario:

  1. Excelente aporte Felipe. El ejemplo calza muy bien con la teoría. El océano azul es un elementos que se puede generar a partir de tecnología como es parte del caso señalado, pero lo interesante es que también puede salir de innovar en la propuesta de valor (i.e. modelo de negocios). Allí es donde se maximiza. Por ejemplo se ha dicho que empresas como Apple no han sido las primeras en llegar a la tecnología pero si en su explotación. Si una empresa logra amalgamar ambos elementos junto con otros de su modelo de negocios podemos llegar a tener océanos azules muy "completos". Vamos a ver como este pionero tecnológico logra serlo además en su modelo de negocios. Interesante sin lugar a dudas.

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